Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

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1451
Legislatura: 1891-1892 (Cortes de 1891 a 1892)
Sesión: 29 de abril de 1892
Cámara: Congreso de los Diputados
Discurso / Réplica: Réplica
Número y páginas del Diario de Sesiones: 187, 5340-5341
Tema: Inversión del crédito extraordinario para la construcción de la escuadra. Incidente sobre la suspensión de la discusión

El Sr. SAGASTA: Pido la palabra.

El Sr. PRESIDENTE: La tiene S. S.

El Sr. SAGASTA: Yo no sé si los informes que han dado al Sr. Presidente de la Cámara respecto de la hora a que se ha abierto la sesión son o no exactos; yo no estaba aquí; pero todos me dijeron que se había abierto cerca de las dos y cuarto. (Denegaciones en la mayoría.) Sucede que a los que me interrumpen como a mí, que no estaban aquí; y debo declarar que no habiendo estado cuando se abrió la sesión, sin embargo, he venido mucho antes que la mayor parte de los que están sentados en los bancos de la mayoría. Recuerdo que cuando llegué a este sitio no había en el salón más que dos o tres conservadores; por consiguiente, los que habían de rectificar esto, que ya digo, serían esos dos o tres Sres. Diputados; pero repito que tengo a mi alrededor muchos que dicen que se abrió la sesión cerca de las dos y cuarto. (El Sr. Danvila: Están completamente equivocados esos Sres. Diputados, porque la sesión se abrió a las dos en punto.) De todos modos, paréceme a mí, y les ha parecido a muchos de la minoría, que tratándose de un asunto como el que estábamos discutiendo, y faltando nada más que una rectificación del Sr. Gamazo, y otra, si quería hacerla, del Sr. Ministro de Marina, que ya parecía que no tenía nada que decir por lo [5340] poco que había dicho al contestar al Sr. Gamazo; que no faltando más que eso, repito, y llevando estas proposiciones de ley una tramitación tan definida y corta, podía haberse continuado el debate hasta haber votado la toma en consideración de la proposición, con lo cual hubiera quedado el debate para mañana y hubiéramos podido entrar ahora sin inconveniente en la discusión de los presupuestos. Esto se ha hecho todos los días con motivo de cuestiones menos importantes, y esto es sin duda lo que ha alarmado a la minoría.

Además, se trataba de una proposición incidental que, según el Reglamento, hay que discutirlas en el acto, y todavía tendría la minoría la consideración de dejar, por ejemplo, que la proposición no se discutiera, bastando que se tomara en consideración, y aplazar el debate para el día siguiente, cuando el Reglamento autoriza para que continúe. Creo que en el convenio de los representantes de las minorías con el Sr. Presidente de la Cámara no puede caber que se varíe el Reglamento hasta el punto de modificar el carácter de las proposiciones incidentales, cuya discusión siempre ha quedado a salvo en esos acuerdos. De manera que, como transacción, creía yo que podría votarse la toma en consideración de la proposición incidental y dejar el debate para mañana, aun cuando las minorías tengan el derecho de pedir que siga el debate hasta su terminación.

Yo desearía que el Sr. Presidente cediera en esto, como las oposiciones cederán también en el derecho que el Reglamento les da en cuanto a que las proposiciones incidentales se discutan cuando se presenten.



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